Jornada 03 Días del futuro, pasado (15)


Sólo cuando se jubilaban se podían permitir tener una vida distendida y no preocuparse del dinero. Aunque tampoco es que vivieran tan mal si se miraba más a fondo, pero ¿quién iba a hacerlo? Era cierto que alguna que otra vez alguien había caído en la tentación de ostentar más de la cuenta pero nunca había ido a más y no se había corrido peligro de ser descubiertos… hasta la llegada de Gerald.

Todo el experimento de Doc había sido un error. Sacrificar una ciudad entera para averiguar simplemente cosas que ya se sabían sobre los muertos vivientes: cómo podían infectar a la gente, como podían morir, cuánto tardaban en convertirse… Nada de la información obtenida había sido vital y en cambio la ciudad y todos sus habitantes, vivos y muertos, habían sido incinerados para ocultar aquella aberración. Y habían provocado el nacimiento de un terrible e infatigable enemigo.

Mara Grumpy había sido una militar antes de aquello. Alguien de quien el grupo no se había preocupado cuando por sorpresa había sido asignada a la ciudad para protegerla.

Jornada 03 Días del futuro, pasado (14)


Y una vez todos aquellos continentes habían sido transformados en lugares poblados por zombis, se las habían arreglado para seguir haciendo negocio con aquella desgracia dejando que la amenaza existiera en vez de luchar por eliminarla. Y habían apoyado investigaciones que no iban encaminadas a eliminarlos sino a aprovecharse de ellos buscando solo el interés económico.

Y eso había provocado largas discusiones que no habían llevado a ninguna parte. Sólo a que Víctor fuera marcado como peligroso por sus pensamientos que iban en contra del grupo. Y la mayoría era poderosa y parecía decidida a obligarle a… ¿dejar? El grupo. No se sabía de nadie que hubiera dejado de pertenecer al mismo. Era cierto que algunos por edad se habían ido retirando, pero era por necesidad y no por voluntad propia. El miedo a que alguien les abandonara y luego revelara al mundo todo lo que sabía era bastante estúpido.

Al fin y al cabo, ¿Quién iba a hacerle caso? ¿Quién se lo iba a creer? Que había un grupo de personas poderosas que nadie sabía que existía y que llevaban vidas normales de cara al resto el mundo. Amas de casa, aburridos contables, basureros… ¿Quién se iba a creer que ellos eran los más poderosos del mundo y movían los hilos desde las sombras?

Jornada 03 Días del futuro, pasado (13)


Pero el nuevo grupo resultante de todos esos enfrentamientos era el que ahora se conocía. Y aunque inicialmente se había resuelto seguir con el objetivo principal de preparar a la gente contra los zombis, lo cierto es que al final ese objetivo había pasado a un segundo plano dado que los miembros habían decidido que era mejor aprovechar esos conocimientos en beneficio propio y el grupo se había comenzado a dedicar a acumular poder en las sombras dictando el futuro de la sociedad sin que ésta lo supiera.

Hasta que finalmente los zombis habían aparecido en un número nunca conocido. Algunos miembros habían defendido que era hora de dirigir a la Humanidad en su momento más oscuro pero la mayoría había visto aquello como una oportunidad para resolver bastantes problemas como la escasez del petróleo, el problema de la numerosa población y la pobreza… Y conseguir más poder.

Las pérdidas de vidas habían sido bastante altas sobre todo en los países no desarrollados. Como siempre había pasado el Primer Mundo había mirado para otro lado cuando le habían necesitado con la excusa de que ellos también tenían problemas y el grupo había apoyado esa decisión basándose una vez más en sus propios intereses. El poder no lo ganarían salvando a aquellos países pobres y en los que apenas tenían influencia sino en las grandes ciudades. Además, así a la larga los recursos de aquellos países caerían en sus manos y no tendrían que tratar con políticos corruptos, fanáticos peligrosos o intereses de otros países.

Jornada 03 Días del futuro, pasado (12)


-Si te digo la verdad… es algo que hemos discutido entre varios miembros. Parece que tus ideas no caen bien entre todos los miembros. Que son demasiado radicales. Y existe la sospecha que se ha enviado alguien a Mallorca.

-Seguramente para atar corto al maldito doctor. Hace tiempo que debíamos habernos deshecho de él. Sólo nos ha traído problemas. Y claro que mis ideas no encajan bien entre el grupo. ¡Si son contrarias completamente a lo que quiere el grupo!

Al principio, el grupo había sido formado por media docena de personas. O esa era la leyenda. No se sabía exactamente cuándo había nacido el grupo pero en algún momento en varios puntos del planeta distintos individuos habían decidido formar grupos para preparar a la Humanidad contra la amenaza de los zombis. Con el paso del tiempo, y a medida que los viajes y las comunicaciones se hacían más fáciles y habituales los miembros de esos grupos habían ido cruzándose y habían resuelto mantenerse informados e intercambiar datos. Y poco a poco la mayoría de grupos se habían ido juntando para formar un solo grupo: fortaleza en números.

Pero eso había demostrado acabar siendo un error a la larga. Dado que cada grupo tenía su propia filosofía y sus propios métodos. Eso había provocado enfrentamientos internos que habían pasado de ser verbales a físicos. Y se habían producido guerras internas por el poder hasta casi acabar desapareciendo todos. Por suerte al reducirse el número de miembros de forma alarmante las cosas comenzaron a calmarse, aunque hubo algunos que prefirieron seguir su camino por su lado abandonando el grupo principal.

Jornada 03 Días del futuro, pasado (11)



-Pero no pensaba que tú te lo tomarías en serio.

-¿Qué quieres que te diga? ¿Qué disfruto con mi papel? Porque es todo lo contrario. ¿Qué pasaría si el jodido informático ese descubre que formo parte de la organización? Ya sabemos que no tiene miedo a ensuciarse las manos y ordenar asesinatos. Joder, ni siquiera yo entiendo el motivo para que tuviera que ser uno de nosotros el que interpretara este papel cuando podríamos haber contratado a alguien para ello.

-Ahora eres tú el que está siendo paranoico.

-¿Seguro? –Preguntó Víctor poniendo el coche de nuevo en marcha- A lo mejor están buscando una manera de mantener contento a Gerald y quieren ofrecerme como sacrificio para aplacar su ira.

Jornada 03 Días del futuro, pasado (10)



Miró a su pasajero alarmado. ¿Podría ser que estuviera ahí para matarle? No, sería estúpido. Claro, que últimamente la organización había llevado a cabo bastante estupideces.

-¿A menos…? –Preguntó Oscar viendo cómo le examinaba con la mirada Víctor-. Espera, no pensarás que voy a… ¿matarte?

-¿Por qué otro motivo ibas a encontrarte conmigo en la clandestinidad a espaldas de los demás?

Óscar puso las manos sobre el salpicadero.

-No voy armado. Simplemente quería hablar contigo lejos de los demás.

-¿Para qué?

-Tú mismo lo has dicho. ¿Qué vamos a conseguir con esta táctica de pretender que los zombis ya existían en la Prehistoria?

-Desprestigiar a cualquiera que descubra la verdad. Que los zombis realmente han existido desde hace mucho más tiempo que la gente piensa. Es un ataque preventivo. De esta manera cualquier persona que trate de sacar a la luz cualquier cosa relacionada con el origen de los zombis se verá frenada debido a libros como… el mío. No se los tomarán en serio. Todo esto ya se explicó en la reunión a la que asististe.

Jornada 03 Días del futuro, pasado (9)



-Pues en la próxima reunión exponéis vuestro malestar… como siempre se ha hecho. No organizando reuniones sorpresa como esta. Creía que justamente tú, con lo paranoico que eres, verías la necesidad de mantener las distancias.

-Es un caso excepcional –respondió Oscar defensivamente- ¿Cómo te sienta la fama? ¿Quieres más?

Víctor dirigió el coche a una salida y se paró al margen de la autopista.

-Yo no elegí este rol –dijo alzando la voz molesto- Resulta que a mí se me ocurrió la idea y tengo conocimientos en el área. Estoy interpretando el papel que el grupo ha decidido. Además te recuerdo que yo me opuse a que el plan lo llevara a cabo alguien de dentro. No es nuestro estilo.

Víctor estaba visiblemente molesto por las acusaciones que estaba escuchando. Era de los pocos que podía presumir, por decir algo, de que su familia había pertenecido a la organización desde el principio de los tiempos. Aunque no se tenía claro cuándo era eso. Y por tanto sabía cuál era la razón principal de existencia del grupo. Y para nada tenía que ver con lo que estaba pasando en la actualidad.

-Mira Oscar, esta reunión no tiene sentido –dijo Víctor al que un pensamiento funesto le pasó de repente por la cabeza- A menos…

Jornada 03 Días del futuro, pasado (8)


-¿No crees que salir por la televisión es algo peligroso para la organización? Te has convertido en una figura pública.

Así que de eso trataba aquel encuentro. Otra vez. Es lo que tenía pertenecer a una organización secreta, que sus miembros siempre creían que las personas de su alrededor lo sabían.

-Tengo el permiso de la organización. Creo que estabas en la reunión que tuvimos y en la que se decidió que era importante desprestigiar cualquier tipo de investigación sobre el origen zombi.

-Pero no eres el único que se está convirtiendo en famoso.

-Oh, por favor. Usas la palabra ‘famoso’ como si cualquiera más allá de un vecino o del carnicero de mi barrio fuera a conocerme. Y aunque fuera así, ¿qué más da? ¿Crees que no sé cuándo me están siguiendo? ¿O que no tomo precauciones?

-El caso es que no soy el único que está incómodo con esta nueva política.

Era cierto que históricamente la organización se había movido en las sombras. Seguramente si alguien supiera de su existencia pensaría que la gente que formaba parte de la misma debían ser poderosos empresarios, lo cual era algo completamente alejado de la realidad. Era cierto que había algún potentado, pero en general eran personas anónimas para la sociedad. Gente con la que uno se cruzaba por la calle sin imaginar o sospechar que controlaban el mundo. ¿y por qué debían de hacerlo? Habían creado un entramado de organizaciones dirigidas por gente poderosa que en realidad no pintaban nada salvo como decoración pero que cumplía con dos objetivo: alejar la atención de la realidad y tener cabezas de turco intocables debido a su dinero.

Jornada 03 Días del futuro, pasado (30)


ses-estacions-03_v2

Diario de guerra, 9 de enero de 2010 (y III)
Lo cierto es que está todo en silencio. Joder, al final eso que decía la gente de que lo de los ruidos se echan de menos cuando faltan era verdad. Ni aviones, ni el ruido de los motores de los coches, o las sirenas de las ambulancias… ni los gritos de los vecinos o los niños llorando. Incluso las televisiones no se escuchan. El silencio me está poniendo de los nervios, dado que cada vez que una puerta cruje o una ventana se cierra a lo lejos salto de repente asustado y cojo la escopeta.

Supongo que tendré que acostumbrarme a este nuevo mundo de silencios. Ni gaviotas, ni los jodidos estorninos que siempre estaban volando, aparecen ahora. Creo que voy a pasar otra mala noche. Pero al menos esta vez tendré una escopeta a mano y me sentiré más seguro.

Jornada 03 Días del futuro, pasado (7)



Víctor salió del estudio en el que se rodaba el programa después de firmar varios ejemplares y se dirigió al parking en el que había estacionado su coche. Para su sorpresa había alguien esperándole.

-Oscar… ¿sucede algo? –Preguntó algo sorprendido al verle.

-Tenemos que hablar –dijo de forma misteriosa Oscar a modo de saludo.

Víctor abrió su coche y le indicó que entrara. Puso el motor en marcha y apretó un botón de la consola del vehículo.

-¿Algún destino en particular? –Preguntó Víctor con curiosidad.

-Puedes conducir aleatoriamente.

Oscar siempre había sido algo paranoico. En su negocio, si se podía llamar así, era algo natural, pero lo suyo era un poco exagerado. Seguramente debía de llevar un inhibidor que impedía que sus conversaciones fueran grabadas y mucho menos escuchadas. Y no dejaba de mirar por el retrovisor por si estaban siendo seguidos. Seguramente, incluso habría inspeccionado el coche buscando algún dispositivo de seguimiento. Entró directamente en la autopista que estaba despejada y cogió velocidad.

-Bien, ya estamos solos. ¿A qué viene tanto misterio?