Jornada 06. En la boca del lobo (7)


Salió al pasillo comprobando que estuviera vacío. Luego comenzó a andar con normalidad tratando de pensar dónde podría estar el buen doctor. No sabía si preguntar por él levantaría sospechas. O si le conocerían como doctor siquiera. Había mucha información que le faltaba, y eso en una misión de este tipo era muy peligroso. ¿Qué pasaría si preguntaba por el doctor? ¿Le dirían simplemente dónde estaba? ¿Le preguntarían para qué quería saberlo o simplemente le pegarían un tiro? Se cruzó con un par de marines que iban bromeando y que no le prestaron la menor atención. Respiró algo aliviada. Aunque no debía confiarse.

Si Doc estaba a bordo debía tener su camarote y si estaba como científico, dispondría de su propia zona de trabajo. Eso era obvio. ¿Estaría en una zona restringida? Eso sería un problema. Había conseguido lo más difícil, colarse a bordo sin ser vista. Pero ahora tenía que buscar una aguja en un pajar. Y no tenía ni idea de cómo buscarla. Comenzó a caminar sin un rumbo determinado mirando de vez en cuando por dónde iba, escuchando conversaciones y tratando de pasar desapercibida. Mientras caminaba trataba de recordar los planos del portaaviones. ¿Cómo podía encontrar a alguien en un sitio que medía más de 300 metros de largo y varios pisos de alto? A lo mejor realmente tendría que habérselo pensado mejor.

Durante un momento se despistó y cuando quiso darse cuenta había chocado contra alguien.

-Lo siento- dijo rápidamente tratando de salir del aprieto-. Iba algo despistada.

La víctima del choque la miró de arriba abajo y fue cuando se fijó en que no llevaba botas. Antes de que pudiera decir nada Mara había sacado el cuchillo y se lo había puesto en la barriga mirando a su alrededor esperando que nadie la hubiera visto.

-Lo siento- le dijo al soldado-. Me temo que estás en el sitio menos adecuado.

-¿Señora? –Preguntó el soldado confundido al ver el cuchillo- ¿Qué sucede?

-Estoy buscando a un doctor –dijo Mara esperando sacar algo positivo de esa situación.

-Puedo indicarle dónde está la enfermería –se ofreció el soldado-. Seguro que ahí pueden ayudarla.

-No estoy buscando ese tipo de doctor –dijo Mara susurrando al odio del soldado mientras se ponía a su espalda y le seguía amenazando con el cuchillo-. Es un tipo que no está aquí destinado, no es un soldado, a lo mejor ni siquiera se hace pasar por doctor.

-No la entiendo señora –dijo el soldado algo nervioso- ¿Un doctor que no es un doctor?

-Alguien que lleve a bordo poco tiempo –se explicó mejor Mara- que no sea un soldado, ni sea del ejército.

-Ah, él –dijo el soldado pareciendo saber a quién se refería.

Deja un comentario

No hay comentarios aún.

Comments RSS TrackBack Identifier URI

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s